Los padres de ella nunca mueren
Álvaro Díaz Lorenzo pone su tercer proyecto sobre la mesa. Señor, dame paciencia se sube al carro de películas que apoyan su base cómica y narrativa en Los padres de ella. Es inevitable pensar en las referencias, y es que las últimas comedias españolas con notable éxito, han sabido sobre que titanes les convenía apoyarse.
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David Guapo es el Dani Rovira catalán
En esta cinta tenemos un elenco de actores que funcionan tal y como se esperaba de ellos. Jordi Sánchez sigue en la línea de roles cercanos a su personaje más característico: Antonio Recio (La Que Se Avecina). Por otro lado tenemos a la ya consagrada Rossy de Palma, o a Megan Montaner, Boré Buika o Paco Tous. Sorprendente la actuación del que puede considerarse como el Dani Rovira catalán: David Guapo. La expresividad del humorista crea gags que consiguen ganarse al público.
La trama ya nos sonará a todos: el ya conocido padre «facha» (es decir, tradicional, franquista y siempre cercano a la política de derechas) se ve en una situación de conflicto cuando conoce a sus yernos: un negro vasco gay, un andaluz antisistema y un catalán con los clichés que implica.
Seguimos en la misma línea
Este argumento nos lleva sonando años y años. Desde Los padres de ella, aquella historia en la que «toca conocer a los suegros» ya es todo un género. Lo hemos visto en Ocho apellidos vascos, Es por tu bien y ahora en Señor, dame paciencia. Es más un apunte que una queja. Siempre se puede jugar con lo ya existente y Señor, dame paciencia consigue hacernos reír.
La actuación está a la altura y la fotografía tiene sus altibajos, pero por lo demás, no estaremos perdiendo el tiempo al ver esta película.
Puntuación: 6,5 / 10.
Le pondría más, pero el factor innovación no aparece. Uno se pasa la mayor parte de la película pensando: esto ya lo he visto antes.
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