Algunas notas rápidas:
Para empezar he de decir que escribo como una gran fan de la primera película de Mamma Mia!, pese a ello, la realidad no me ha impedido ver los grandes agujeros de esta segunda entrega.
Ahora sí que sí, ¡empezamos!
Esta película llega diez años después que la primera y trata sobre Sophie (Amanda Seyfried) lidiando por sacar adelante el hotel ahora que su madre (Meryl Streep) ha fallecido. Además Sophie está embarazada lo que le acerca más a su madre que nunca y sirve de pretexto para contarnos la historia de Donna mediante flashbacks.
En esta época de secuelas, spin offs, precuelas y toda clase de prolongaciones forzadas de productos de éxito, no me esperaba gran cosa de esta película, pero aún así la encuentro bastante decepcionante.
Obviamente al ver un musical comercial como este no vas con la intención de ver una obra maestra que te invite a reflexionar sobre la naturaleza humana, ni tan siquiera esperas que te emocione excesivamente. Vas a ver algo sencillo, alegre, entretenido y con música marchosa y pegadiza. (Con la música estoy bastante satisfecha, aunque la mayoría son baladas un poco ñoñas y hay poca marcha en comparación con la primera y muchas canciones son remakes de las que ya conocemos.)
Suena a hueco
En cuanto a la trama: es insulsa y hay partes que son hasta aburridas. Es una de estas películas en las que sales del cine y te preguntas si realmente ha pasado algo en toda la película. Y es que el resultado es un conjunto de flashbacks muy estéticos que no aportan nada, pues solo son la representación visual de lo que ya contaban en la primera sobre los tres posibles padres y una trama presente muy pobre en la que el único impedimento que tiene el personaje de Sophie para conseguir su objetivo es una tormenta y un pequeño enfado con su marido que se resuelve sin que nadie haga nada.
A favor de esta película solo puedo alabar la interpretación de casi todos los actores, sobretodo de Lily James (Donna de jóven), la estética, los números musicales y un estupendo montaje, en especial en las transiciones que unen el presente con el pasado, reflejando perfectamente este paralelismo madre-hija que acaba siendo el meollo de la película.
Su título: Mamma Mía! Una y otra vez, le viene como anillo al dedo. No aporta nada nuevo y lo único que la mantiene a flote es el recuerdo su predecesora. Por último, ya que hablamos de no aportar ¿Que hace Cher en esta película?
Puntuación: 5 / 10.