Netflix toca todos los palos
La primera vez que nos vimos (When We First Met) es una comedia ¿romántica? original de Netflix que tiene a Adam Devine (Modern Family) y Alexandra Daddario (Baywatch) como caras visibles.
Noah (Adam Devine) vive enamorado de Avery (Alexandra Daddario), una de sus mejores amigas, pero el amor no es del todo correspondido. Noah siente que en la noche que se conocieron dejó pasar una gran oportunidad: ser algo más para ella.
Un día y tras un enorme chasco (ya se verá porqué) Noah acaba en un antiguo fotomatón que le devolverá a la noche en la que conoció a Avery. Noah, intentará arreglar de muy diversas formas lo que hizo, dándole unos resultados que quizás no le hagan mucha gracia. Todo ello a través de unas locas idas y venidas en el tiempo.
Cumple la función para la cual fue concebida
Muy probablemente no hayas escuchado hablar de La primera vez que nos vimos, y es que no es uno de los estrenos más sonados de la conocida plataforma, pero es cumplidora, rellena un hueco en el catálogo de la multinacional, un fondo de armario que pasa desapercibido pero igual de necesario.
Y es que está película no inventa nada nuevo, todos los elementos que la conforman ya los hemos visto antes en otras películas. Pero cumple la función para la cual ha sido rodada: entretener. Y es que a veces viene bien desconectar y ver una película «tonta» que te haga, al menos, pasar un buen rato.
Al igual que un corta-césped, le cuesta arrancar
Aquí vienen los puntos más discutibles de La primera vez que nos vimos, a la película le cuesta arrancar, ya que se para a sentar unas bases sobre las cuales se desarrollará la acción posterior.
Pero tranquilo, a los quince minutos de película esta se acelera y no parará hasta su final. Eso sí, no esperes que la película justifique los viajes en el tiempo, simplemente no lo hará, todo ocurrirá por arte de magia, sin criterio y condicionante alguno.
El gran punto fuerte de esta película son los actores, los encargados que hacen que una película aparentemente mala se convierte en una decente.
Como cabeza de turco tenemos al gran Adam Devine. El conocido y reputado cómico estadounidense hace un buen papel, y esto se nota, gracias a su don interpretativo y su enorme capacidad de improvisación hacen que la película tenga cierta gracia.
Lo dicho, una comedia entretenida, que sin ser nada del otro mundo puede hacerte pasar un buen rato.
Puntuación: 5’5/10