DC no lo tenía nada fácil desde ‘Escuadrón Suicida’. El universo expandido de la marca de Batman tenía como reto superarse y volver al buen camino tras los malos resultados de sus últimas producciones y utilizaron como gran apuesta la independencia de una de las villanas más conocidas universalmente, Harley Quinn.
La eterna enamorada del Joker es la gran protagonista del nuevo filme, que dirige Cathy Yan, en la que se libera de las ataduras de ‘Míster J’ para establecerse por su cuenta en la siempre complicada y dura ciudad de Gotham, una de las localizaciones más emblemáticas de los cómics.
Una Harley Quinn totalmente diferente
La película, que ocurre después de todos los acontecimientos de ‘Escuadrón Suicida’, sigue los pasos de una Quinn (Margot Robbie) completamente independiente después de su ruptura con el Joker. La historia sigue sus pasos y sus enfrentamientos con diferentes miembros del mundo del crimen de Gotham.
Entre esos villanos se encuentra Máscara Negra, interpretado por Ewan MgGregor, que cambia su registro, de bueno a villano. En este filme, toma el rol de Roman Sionis, un empresario obsesionado con las máscaras y dispuesto a lo que sea para conseguir todos sus objetivos y convertirse en el rey de Gotham.
No solo siguen a la evolución de estos dos personajes, sino que se introducen nuevas personalidades en el mundo cinematográfico de DC. Canario Negro o Cazadora hacen sus primeras apariciones dentro de las películas de una de las marcas más conocidas de la Tierra.
En esos tres pilares se basa la película, para ir conectando las piezas hasta un inquietante final, en el que todo choca entre sí, para culminar todos los acontecimientos trabajados durante las casi dos horas que dura “Aves de presa”.
El color y las interpretaciones, grandes protagonistas
Margot Robbie, que se convirtió en la figura más reforzada en “Escuadrón Suicida” vuelve a ponerse en la piel de uno de los personajes más complejos de todo el universo DC, y lo hace de forma magistral.
Harley Quinn es la pieza central de esta intrincada trama, y demuestra que el trabajo de su actriz es tremendo, una vez más. La manera de expresarse, su forma de mostrar sus emociones, especialmente en el comienzo de la obra muestran a una de las intérpretes con más potencial de todo Hollywood.
Otro de los elementos diferenciales de “Aves de presa” es la entrada de un veterano como Ewan McGregor. El que fuera intérprete de Obi Wan Kenobi demostró su amplia capacidad de mejorar todos sus registros y la forma en la que expresa el sadismo y la maldad de su personaje demuestra la calidad de su interpretación.
Mientras, otro de los grandes elementos en los que se basa la película es en la manera de entender la fotografía. Siguiendo la línea de su predecesora, se sigue el color y la gran cantidad de alegría en cuanto a elementos pictóricos en casi todas, por no decir, todas las escenas.
Esto sucede especialmente cuando aparece Harley Quinn en escena. En el caso de Máscara Negra, todo cambia radicalmente. La oscuridad se hace con todo el plano, y el acto final, que se desarrolla entre la niebla y la misma oscuridad, demuestra los contrastes entre los protagonistas.
Mejoras visibles, pero queda un largo camino
Tras los fracasos de las últimas apuestas de DC, como fue el caso de “Liga de la Justicia”, “Aves de presa y la fantabulosa emancipación de Harley Quinn”, se convierte en un soplo de aire fresco para una marca que necesita de forma desesperada un re-lanzamiento para intentar alcanzar a Marvel.
Con temas novedosos y personajes alejados de los cánones tradicionales, la forma de contar la historia es lo más destacado. Aunque quedan muchas cosas por pulir, sobre todo en el contenido, es un buen punto de partida para DC, que tiene un largo camino para encontrar, paradójicamente, su propio camino para intentar batir a su gran rival y reina en las recaudaciones en el cine de superhéroes.
Puntuación: 6,5/10